jueves, 15 de octubre de 2015

MADRID CORRE X MADRID + MEDIA MARATÓN DE TALAVERA 2015

Retomo mis obligaciones periodísticas aunque sea en formato reducido. Con la disputa del triatlón de Zumaia se terminó el triatlón, pero este maltrecho cuerpo mío sigue arrastrándose ahora en modo “carreras populares”, como preparación del segundo reto del año, que no es otro que la maratón de Donosti (en qué hora me pareció buena idea hacer una maratón “a secas”, ahora me pregunto).

Vamos con la crónica, aunque sea breve, de las dos carreras populares disputadas en este septiembre-octubre de 2.015:

MADRID CORRE POR MADRID (10K).- Volvía a disputar, cinco años después, la carrera que significó mi “debut oficial” en el mundo del running. Qué lejos queda ese día, cuando aún tenía dudas de si sería capaz de acabar semejante distancia (no había corrido más de 6K antes de dicha prueba). Hito histórico que finalicé en 55:46 y que afronté con humildad y mucho, mucho respeto y conservadurismo.

Un lustro después conseguí engañar al bueno de Iker para que me acompañara luciendo el dorsal de mi hermano Nacho, que finalmente decidió no disputarla (vago). No andaba Iker muy convencido de querer "cascarse" un 10K, ya que se supone que él ya estaba en descanso y pretemporada, pero mi poder de persuasión infinito hizo su trabajo y allá que nos plantamos en el madrileño parque del Retiro para pegarnos un calentón de los buenos.

Decidimos salir cada uno en nuestro cajón, previamente asignado, Iker no quiere forzar tras estar parado varios días y yo tengo instrucciones de mi entrenador de dejarme la vida en la carrera.

Saludo a Rob, que también corre como preparación de su NYC Marathon, a primeros de noviembre. Como el lector sabrá, el amigo Rob juega en otra liga, la de los sub36/37 con los que yo ni siquiera soy capaz de imaginar.




Como siempre salgo fuerte, lo de menos a más nunca me ha salido demasiado bien y como salga determina normalmente mi carrera. Si salgo fuerte acabaré menos fuerte, pero si salgo lento me contagio del ritmo y acabaré más lento…

Primeros 2kms favorables por Alcalá hasta Cibeles, por debajo de 3:50/km y la liebre de 40min, que no es otro que Arturo Casado, la tengo a tiro, a escasos 50m. Vamos bien. En Gran Vía hasta Callao toca apretar los dientes en subida, pero me sigo viendo bien. Preciados, Arenal hasta Opera en bajada, recuperando el resuello y alcanzamos el km.5 a la altura del Palacio Real por la calle Bailén. 20 minutos “altos”, casi 21. Voy en tiempo de bajar de 42min, que es el objetivo.

Arturo y los potenciales “sub 40” siguen a tiro, pero hasta ahí. En la subida por la calle Mayor hasta Sol pegan el palo y me dejan frito, llegando a la calle Sevilla para bajar de nuevo a Cibeles mi tembleque de piernas es ya evidente.

En los dos kilómetros favorables hasta Atocha no consigo recuperar un buen ritmo, y ahí ya sé que lo llevo crudo, porque de Atocha hasta el final es todo subida.

Maldito rampón desde Cibeles hasta la puerta de Alcalá y más allá, hasta la entrada al Paseo de coches del Retiro, donde ya voy fundido y no puedo esprintar. Por un momento de todas formas creo que lo puedo conseguir, trato de cambiar el ritmo, voy regulando pero los malditos arcos de pre-meta me confunden y cuando creo que ya está ahí la meta aún me quedan 50-100m.

42:13. Joder, qué rabia.


Bueeeeeno, tampoco es para rasgarse las vestiduras, además me han salido 100m más por el GPS. Buena carrera Dani, lo has dado todo, no te has guardado nada. Bien.

Me encuentro con Rob, espero a Iker y nos despedimos de nuestro amigo inglés hasta la próxima, buena suerte Rob en NY, ¡disfruta!

Iker jura en arameo y blasfema contra las cuestitas de Madrid, ya tuvo ocasión de disfrutarlas en un recorrido similar, la “Ponle Freno”, hace unos años. Sonrío, le digo que deje de quejarse y que se prepare para disfrutar de un buen chuletón, que nos lo hemos ganado.

No todo es CORRER...


MEDIA MARATÓN DE TALAVERA: Me comenta semanas atrás un compañero de la ofi,  “Manu” Alberti, que va a disputar la “media” de Talavera, como preparación para su maratón de Valencia. Recorrido llano, promete, a dos vueltas.

Pues venga, vale, vamos para Talavera.

La noche anterior duermo poco, por no decir nada. Es el mundial Ironman en Kona, Hawaii y servidor se traga gran parte de la prueba en su iPad. Apenas 3h de sueño, pero no hay dolor.

Me acompaña esta vez Iván, que no hace ni una semana que ha terminado el Ironman de Barcelona-Calella con un resultado espectacular, 9h27. Le digo que está “colgao”, que va a ir frito de piernas, pero dice que da igual, que me acompaña hasta que aguante. Pues por mí fenomenal, menuda liebre me he buscado.

Día fresco y lluvioso, pero finalmente el cielo abre justo antes de la salida, tiempo ideal para mí.

Me pregunta Iván que cúal es el objetivo. A 4:30/km aprox. Iván, no más rápido de ahí. Vale, me dice.

Pistoletazo y vamos. Iván por delante, constantemente mirando para atrás. Primer kilómetro, pregunta Iván cómo vamos, 4:15 tío, afloja. Vale, el 2 a 4:20, el 3 igual, y a esos ritmos, siempre sub 4:30/km van pasando los kilómetros. Circuito llano, hiper-llano, para volar.

En el km. 8 me dice Iván que le duelen las piernas y que se retira al término de la primera vuelta, será cabrón, y me dejas tirado con un ritmo que no voy a poder aguantar…

Se une a un grupito y les pregunta el ritmo que llevan. 4:25. Venga, ponte aquí que es buen ritmo, me dice.

En el 12 Iván se retira dejándome colocadito en el grupo anterior, pero ya voy jodido y sé que no les voy a poder aguantar. Aun así sigo en sub 4:30 de media, incluso hasta el km.16, donde me está esperando “el del Mazo”, que me arrea así, en todo lo alto.

Paso las de Caín en los siguientes 2 kms, yéndose el ritmo a 4:40s. Me repongo en el 18, pero la ruinosa y lamentable inacción de un voluntario, que está de charleta en una rotonda con un policía, hace que me equivoque de recorrido en el 19, por lo que tengo que desandar 40-50m, junto con el consiguiente cabreo e improperios dirigidos al susodicho voluntario.

Una vez deshecho el entuerto trato de recuperar el ritmo, voy ya al límite.
 

Último kilómetro y tengo el sub 1h35 difícil, pero no imposible. Sigo apretando todo lo que puedo, va a estar ahí, ahí…

…otra vez 13 segundos me separan del objetivo. Cagüenlamarsalada, ¡maldito voluntario!

1h35:13. Nueva marca personal en la distancia, a pesar de todo.
 

¿Decepcionado? No, en absoluto. Dadas las circunstancias, las escasas horas de sueño y la mierda de la equivocación, he estado muy cerca, y no deja de ser una carrera de preparación para un hito mayor, que es la maratón. Estoy muy contento.

Dicen las reglas no escritas de los 42.195m que si bajas de 1h38 en una media un mes antes de la prueba, eres un potencial sub3h30 en el doble de distancia. Pues nada, estamos en el buen camino, según parece.

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